10/11/09

El sorprendente sabor de Pekín









Para llegar al restaurant Da Dong fue necesario hacer nuestro primer trip en el metro de Pekín. Recién desempacados decidimos que nuestro banquete inicial sería lo que tanta expectativa nos causaba...
La bienvenida fueron 3 cartas: bebidas, entradas y al final, platos fuertes (la cual constaba de 50 páginas wooooooo). Duramos 40 minutos en decidirnos por una entrada de rollitos de aguacate rellenos de salmón ahumado acompañados de una salsa de anguila...uuuuuuuuuff! cero decepciones.
Le siguió el pato, quien fue deshuesado frente a nuestra mesa. Su sabor aún dura en mis sueños, algo dulce y muy crujiente.
Curiosa me pareció la manera de comerlo: sobre unos finos "pancakes" a manera de taco, bañado en salsa de ciruela y acompañado de rábanos y cebollin. Diferentes texturas uniéndose en la boca, no podía dejar de decir: "MMMMMMmmmmmmmmmmmmMMMMMMMhhh....mmmmmmmmh! (preludio de una semana suculenta)
Leí alguna vez que la gastronomía china no destacaba por sus postres, esto es un grave error. Un helado de maíz me hizo (como a Anton Ego en Ratatouille) volver a la infancia.

3 comentarios:

OJ Gonzalez-Cazares dijo...

que mal se atienden! nadie como los chinos para hacer buen pato, definitivamente. Cuentanos mas!

Tiago dijo...

ya no me comformo con el wonton, quiero probar esos guisos

juvman dijo...

Qué viaje, y qué envidia. Lo tenías bien merecido, pues.
Besotes.